¿Quién no tiene en algún cajón de casa un reloj de pulsera que ya no se pone porque se ha quedado viejo o tiene la correa desgastada? Si no lo has tirado es porque sigue pareciéndote especial, así que te presentamos un método fácil y barato para convertirlo en un accesorio a la moda que puedas volver a ponerte sin pensarlo dos veces.
La idea es sencilla, simplemente tienes que sustituir la correa de tu viejo reloj para darle un aspecto mucho de tendencia. En vez de cambiarla por otra le pondremos una bonita pulsera que puedes comprar en cualquier tienda de abalorios o en una mercería un poco surtida. Veamos cómo hacerlo!
Materiales:
- Tu reloj viejo.
- Una cadena, suficientemente larga como para que puedas enrollarla cuatro veces alrededor de tu muñeca.
- Unas tenazas pequeñas para bisutería.
- Arillos.
- Broches para pulseras.
Para empezar, quítale las correas a tu reloj ayudándote de las tenazas.
Extrae de cada una las sujeciones metálicas para volver a ponerlas en su sitio, añadiendo dos arillos de engarce a cada una.
Corta la cadena en cuatro partes iguales y con las tenazas une dos de las partes por sus extremos a las anillas de engarce de un lado, repitiendo el proceso en el otro lado hasta que todas queden sujetas a la esfera del reloj.
Añade los broches a los otros cuatro extremos de cadena, y enróllalo alrededor de tu muñeca.
¡Y ya está! así de rápido tu reloj lucirá más nuevo que nunca, y al haberlo hecho tú te aseguras de que nadie tenga uno igual.
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